Evaluaciòn




LOS PROCESOS DE EVALUACIÓN EN TECNOLOGÍA
El enfoque pedagógico de la asignatura de Tecnología para la educación secundaria en su modalidad de técnicas y generales concibe a la evaluación “…como un proceso permanente, continuo –durante todo el ciclo escolar- y sistemático que le permita al docente obtener información de los conocimientos, habilidades y actitudes de los estudiantes, además de detectar si las estrategias y recursos empleados fueron los adecuados y conocer los factores que posiblemente interfirieron en el logro de los propósitos…"1
En este sentido, el propósito del presente documento es brindar elementos que guíen el proceso de evaluación de los procesos de enseñanza y de aprendizaje en el aula-taller de Tecnología. No pretendemos que este sea un documento acabado, así queda a consideración de los docentes las modificaciones que consideren pertinentes de acuerdo a su experiencia, a la revisión crítica de su práctica y de las características de los grupos a su cargo.


La evaluación: sus elementos y funciones
Tradicionalmente el concepto de evaluación es asociado a un mecanismo de control, presión (castigo o premio), asociado a exámenes, como una actividad realizada al final del curso, y por ello como sinónimo de calificación, cuya finalidad es sancionar el aprendizaje realizado por los alumnos, a través de la verificación de un conocimiento.

Aunado a estas concepciones y prácticas, los sujetos evaluados (usualmente los alumnos) tienen una percepción negativa tanto de los instrumentos como de los sujetos que evalúan (el docente).




Desde nuestra perspectiva la evaluación:
Se deriva de los objetivos de la asignatura, de los propósitos del curso, del bloque y del programa de estudios oficial.


Es un proceso amplio, permanente y continuo, esto implica que se da durante todo el ciclo escolar, no puede quedar limitada a determinados momentos que coinciden
generalmente con el final del bloque o del ciclo escolar.


Tiene un carácter formativo, se evalúa fundamentalmente para comprender y mejorar los procesos de enseñanza y de aprendizaje, así como para tomar decisiones dirigidas hacia la optimización de los procesos educativos.


Se constituye en un proceso sistemático, ya que le permite al docente obtener información de los conocimientos, habilidades y actitudes de los estudiantes, como resultado de su proceso de aprendizaje.


Utiliza instrumentos y criterios que permiten obtener información significativa para formar juicios de valor con respecto al proceso educativo y valorar si el aprendizaje que se ha producido es el adecuado, con el fin de tomar las decisiones adecuadas para proseguir la actividad educativa u optimizar los procesos.


Se sugiere que la evaluación incluya procesos de:
  • Autoevaluación de cada alumno.
  • Co-evaluación entre pares.
Procesos que permitan evaluar críticamente su producción individual y la de su grupo y de proponer cambios y mejoras.






¿Qué evaluamos?

  • El proceso y no sólo el resultado de las actividades cognitivas, procedimentales y valorales que desarrollan en el aula taller nuestros estudiantes, a partir de la identificación específica de los contenidos, conocimientos, habilidades y actitudes a valorar en cada bloque.

  • El desarrollo de los conocimientos y las habilidades creativas que les permitan resolver problemas en la vida diaria, en el marco de los nuevos escenarios tecnológicos.2


  • La evaluación no debe limitarse a juzgar únicamente el producto terminado. Tanto producto como proceso son susceptibles de ser evaluados en tecnología, de hecho existe una fuerte interrelación entre la comprensión conceptual y las habilidades prácticas, y esta interacción se hace patente durante el proceso de resolución de situaciones problemáticas.


  • En los proyectos y productos desarrollados proponemos valorar bajo criterios: técnicos, estéticos, funcionales, estructurales, de desempeño, eficiencia, eficacia, ergonomía, impacto ambiental, entre otros.


  • En Tecnología es frecuente la elaboración de diseños, modelos, representaciones simbólicas, construcción de maquetas, prototipos, proyectos, que implican poner en juego la creatividad del alumno, ante lo cual no es fácil encontrar criterios objetivos de valoración. Ante tal circunstancia no debemos olvidar que si bien se busca estimular la creatividad del alumno siempre debe estar claro que un error o un fracaso pueden conducir a un nuevo conocimiento.


  • Los procesos y las producciones, para mejorarlos, es decir el rediseño con vistas al perfeccionamiento de los productos con base en las deficiencias detectadas en procesos de autoevaluación o co-evaluación.


  • Las estrategias y recursos empleados: para determinar si fueron los adecuados y conocer los factores que posiblemente interfirieron en el logro de los propósitos.


  • El trabajo en equipo y la autonomía en el trabajo, la participación activa en clase oral, individual o grupal, los trabajos, informes e investigaciones, la apropiación de los contenidos y la transferencia de lo aprendido a otras situaciones, la crítica constructiva, entre otros.


  • El objeto de la evaluación son los aprendizajes, sin embargo también se pueden evaluar a las instituciones, el sistema educativo, los programas o proyectos, el proceso de enseñanza, los profesores, con el fin de mejorar el proceso educativo.



¿Para qué evaluamos?

  • Para conocer una situación determinada del proceso de enseñanza y aprendizaje.

  • Para formar juicios de valor.


  • Para la toma de decisiones que permitan mejorar el proceso educativo.



¿Cómo evaluamos?

  • Refiere a la forma en que se constatarán objetiva y subjetivamente los aprendizajes, así como la especificación de los criterios, formas de registro y de análisis para llevar a cabo la evaluación.

  • Algunas de los métodos tradicionales lo constituyen las pruebas de papel y lápiz, que “determinan cuánto aprendieron”. Desde nuestra perspectiva la evaluación va más allá de administrar pruebas para “calificar el desempeño de los alumnos” En la evaluación tradicional abundan los exámenes, pruebas y otros instrumentos basados mayormente en la medición “cuantitativa”.

  • Proponemos evaluar sobre el proceso, es decir el seguimiento desde la aparición de los primeros borradores y bocetos hasta el producto final, pasando por las demás fases, como una de las formas de evaluar los aprendizajes de los alumnos.


Todo proceso de evaluación debe considerar los siguientes elementos:


La búsqueda de indicios visibles
Diferentes formas de registrar y analizar
Criterios para acercarnos al objeto de evaluación
La formulación de juicios de valor


Marpegán propone la elaboración de listas de cotejo que sirven para registrar la evaluación cualitativa en situaciones de aprendizaje de Tecnología. A continuación se muestran algunos indicadores para la evaluación de resolución de situaciones problemáticas.


Escuela:
Bloque:
Alumno: Grupo:
Indicador
Nivel
(escala cualitativa)
Observaciones
Análisis y planteo del problema.


Búsqueda de datos, investigación de la información, disponibilidad de materiales.


Formulación de alternativas de solución (bosquejo de sus ideas).


Diseño de la solución: medios para representarla.


Planificación de las tareas y organización grupal.


Ejecución de la solución.


Ensayo o evaluación de la solución (autocrítica).


Mejoras y rediseño.


Manual del usuario.


Presentación oral.


Trabajo en equipo.


BOLSA (Buen orden, limpieza, seguridad y ambiente).


Transferencia de contenidos a otras situaciones.


Autoevaluación.


Co-evaluación.


Observación participante del maestro en el aula taller de Tecnología.

Modificado de: Marpegán, Carlos y María (Josi) Mandón. La evaluación de los aprendizajes en tecnología.



BIBLIOGRAFÍA

AIRASIAN, Peter W. (2002): La evaluación en el salón de clase. México, SEP, Mc Graw Hill, Biblioteca para la actualización del maestro.
MARPEGÁN, Carlos María, María Josefa Mandón y Juan Carlos Pintos. (2000): El placer de enseñar tecnología. Actividades de aula para docentes inquietos. Buenos Aires, Ediciones Novedades Educativas.


1 Cfr. Educación Básica. Secundaria. Tecnología. Secundarias Técnicas. Secundarias Generales, Programas de Estudio 2006. Documento preliminar. México, Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos, 2008. p. 21, 22.
2 Marpegán, Carlos y María (Josi) Mandón. La evaluación de los aprendizajes en tecnología. En Novedades Educativas. N° 121, p. 12.